Antes de llegar a Lic. Obstetricia, estudiaba una tecnicatura en Bellas Artes. Me encantaba y lo disfrutaba mucho, pero sabía que había ALGO más. Cuando dibujaba, pintaba o hacía esculturas, siempre elegía una mujer, una panza, un bebé o una ola. Así fue que decidí (mientras terminaba la tecnicatura) formarme como doula y voluntariarme en el Hospital de Morón durante un año y medio. Necesitaba saber si mi camino era ser partera.
El día que entré al Hospital de Morón en el 2015, mi cuerpo brillaba, y supe que estaba en el lugar que tenía que estar. Así fue que presencié el primer nacimiento. Tuve tanta EMOCIÓN, que era un desborde de lágrimas, risas y una sensación única e increíble. Sentía que acababa de presenciar un MILAGRO, no lo podía creer… Desde ese día supe que no había vuelta atrás y me inscribí muy entusiasmada en la carrera de obstetricia.
Fue un camino largo, transformador, de mucho esfuerzo y satisfacción. Comenzar a asistir nacimientos desde antes del comienzo de la carrera me dio el entusiasmo que necesitaba para dedicar infinitas horas de estudio.
Entré a la UBA siendo una y salí siendo otra, la carrera me atravesó en muchos aspectos.
Hoy, muchas veces me cuesta creer que lo logré y me siento bendecida de poder formar parte del camino de muchas familias.
Barbara Harper me presentó las primeras herramientas de hipnoparto en una beca que me gané en la facultad. Entender de qué se trataba fue un antes y un después, lo que me llevó a hacer la formación completa como educadora de Hipnosis Blissborn para el nacimiento.
Colaboro con mujeres y parejas utilizando herramientas específicas para la gestión del dolor, integrando un enfoque holístico que combina técnicas tradicionales con recursos modernos como el hipnoparto y la homeopatía. Esto permite transitar el proceso del parto de manera tranquila, consciente y empoderada.
Estoy aquí para ayudarte a sentirte segura y a confiar en tu capacidad para dar a luz, mientras trabajamos hacia una experiencia de nacimiento positiva.
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Hace un rato nació Pedro! Logramos el parto vaginal, con inducción. Pero un trabajo de parto RE lindo! Mucha contracción que arracaba con las visualizaciones y después algunas respiraciones mandando aire al útero, tratando de relajar y se pasaban muy bien. Y entre contracción y contracción súper relajada, cantando, unas horas que disfruté un montón. Después llegó la parte más difícil pero se llevó bien, con foco en la recompensa y un encuentro con el gordo que fue un AMOR. Gracias por este tiempo de acompañarnos y todas las técnicas! Un parto súper difrutado!
— VIRGI A., mamá de PEDRO – Parto VAGINAL
Estos encuentros personalizados, además de aprender técnicas de relajación (Hipnoparto) e información basada en la evidencia, se trata de descubrir, a tu ritmo y de la manera que mejor resuene con vos, el poder interior que tenés para traer a tu bebé al mundo.
